El país está efectivamente cerrando sus puertas desde hoy a la mayoría de norteamericanos que quieran adoptar chicos rusos. La medida sigue a nuevos obstáculos para la adopción por parte de chinos y guatemaltecos

De esos tres países es el 70% de huérfanos que llegan a los Estados Unidos de los últimos cinco años, casi el 10% de todas las adopciones en Estados Unidos.

Rusia ajustó las reglas para agencias de adopción acreditadas el año pasado y aún debe renovar licencias para las 50 o más agencias norteamericanas que trabajan allí. Expiraron hoy las licencias de un año de las últimas dos agencias que operaban.

"Nunca tuvimos esta situación antes, donde no hubo ni una agencia acreditada", dijo Tom DiFilipo, presidente del Joint Council on International Children's Services, un grupo de bienestar infantil.

Dice que la suspensión podría durar algunos meses. DiFilipo afirma que el problema es "burocrático" porque Rusia no creó formularios necesarios para regular más severamente. El número de huérfanos enviados a los Estados Unidos desde Rusia cayó de 5.865 en 2004 a 3.706 el año pasado.

"Esta resistencia no es nueva, pero es aún peor", afirma Tom Atwood, presidente del Consejo Nacional para la Adopción (National Council for Adoption). "Es claramente una medida anti-norteamericana", dice, impulsada por los pocos pero horrendos casos de chicos rusos que fueron abusados e incluso, en docenas de casos, asesinados por sus padres adoptivos norteamericanos.

Las agencias de adopción norteamericanas fallaron en proteger a los chicos y merecen castigo, dice Maureen Flatley, consultora en adopciones en Boston. Representó a Masha Allen, una chica de 14 años que dijo al Congreso el año pasado que había sufrido abusos desde que fue adoptada desde Rusia a los cinco años.

Los casos de abusos eran "muy perturbadores" pero poco usuales, porque las agencias monitorean a las familias durante años, afirmó Filis Casey, directora ejecutiva de Alliance for Children, una de las últimas dos agencias de adopción norteamericanas que trabajan en Rusia.

Dice que le preocupan las agencias porque no puedan ayudar a los chicos atascados en los orfanatos rusos. "Será desastroso para los chicos y para las familias", expresó.

Las adopciones privadas no resultan afectadas pero la vasta mayoría se hace por agencias. La adopción de niños extranjeros por parte de norteamericanos se disparó entre 1992 y 2004, pero cayó, luego de que algunos países aumentaran las restricciones y otros estuvieran en evaluación.

China, el primer país de adoptados extranjeros desde 2000, está cerrando los permisos. En mayo, prohibirá adopciones a solteros, gays, obesos, mayores de 50, consumidores de antidepresivos y personas de bajos recursos.

Las prácticas en Guatemala trajeron advertencias el mes pasado desde el Gobierno norteamericano, que dijo haber hallado evidencia de documentos fraudulentos de chicos guatemaltecos que llegaban de contrabando para ser adoptados. Guatemala dijo que reajustaría la supervisión de los casos.

"La adopción es terriblemente dura en los países donde la gente más busca", dice DiFilipo. Por otro lado, dice, Vietnam de nuevo está permitiendo adopciones, y Etiopía aumenta la cantidad.

Hay alrededor de 150.000 adopciones locales y extranjeras en los Estados Unidos por año, según el Consejo Nacional para la Adopción.